Mi nombre es Juan Ignacio Moriones, soy licenciado en Psicología, mi orientación es cognitivo conductual y tengo una maestría en Psicología del deporte y la actividad física.
Como psicólogo deportivo me ocupo de la asistencia a deportistas, atletas, equipos, árbitros como también asesoramiento a entrenadores y profesores de educación física, entre otros protagonistas del deporte.
Preparo al sujeto en técnicas para el entrenamiento de las habilidades mentales necesarias como la concentración, manejo de estrés, control de ansiedad y miedos, confianza entre otras variables a entrenar.
El ámbito de trabajo no se limita al consultorio, sino que se extiende al campo mismo de la actividad física: gimnasio, cancha, club, etc.
El secreto profesional rige del mismo modo que en la práctica clínica. Salvo que con el consentimiento del deportista se intercambie información con el cuerpo técnico con el fin de optimizar las mutuas intervenciones.
Tanto el cuerpo como la mente desarrollan una interacción, hay muchos ejemplos de esto, tales como experimentar temor y ver como esta percepción se acompaña de sudor, aceleración del pulso cardíaco, etc., lo cierto aquí es que muchas veces se entrena físicamente y se espera que el resto de las sensaciones se ajusten solas o con el tiempo. El cuerpo y la mente son uno solo, son un binomio sabiamente relacionado. La mente también se puede entrenar, para esto es necesario acudir a un psicólogo deportivo.